Con la llegada de compresores como los de oxígeno y los de hidrógeno, también han surgido los compresores de CO2 y se están aplicando gradualmente a diversas industrias, trayendo diversos productos a la humanidad. El dióxido de carbono no es tan inútil como la gente piensa, puede usarse no solo para el procesamiento químico, sino también para la protección de alimentos.